En la actualidad, existen muchos sistemas que contienen información valiosa para las empresas, quienes almacenan en sus computadores información financiera o datos confidenciales de sus clientes.
Para evitar que toda esa información quede expuesta en la red, las compañías deben cumplir ciertos estándares de seguridad para evitar el robo o eliminación de datos y permitir garantizar a sus stakeholders la confidencialidad, disponibilidad e integridad de los datos.
Uno de los métodos para conseguir aquel propósito es el Ethical Hacking o Hacking Ético, que tiene como objetivo las vulnerabilidades que hay en el sistema, a través de pruebas de infiltración, que se realizan para valorar y evaluar la seguridad física y lógica de los sistemas de información, redes informáticas, aplicaciones web, bases de datos, etc.
Entre los beneficios que tiene un servicio de ethical hacking, se reconoce la capacidad de reconocer configuraciones inadecuadas en las aplicaciones, identificar las vulnerabilidades para solucionarlas, hallar los sistemas que necesitan de una actualización y disminuir el tiempo necesario para combatir las situaciones de riesgo.
Finalmente el hacking ético se originó para combatir las intenciones maliciosas de los piratas informáticos y las empresas tienen la necesidad de contratar a profesionales de este método para cumplir con su deber de informar sobre su seguridad.
Es importante saber que las entidades más seguras son aquellas que descubren oportunamente sus riesgos.